La Red Jesuita con Migrantes para Latinoamérica y el Caribe (RJM-LAC) confirma en Bogotá su misión de ser la expresión de articulación de la Compañía de Jesús en torno a la prioridad de la migración en esta región del mundo, respondiendo activamente a los retos de acompañamiento, protección y promoción de las personas migrantes, retos en constante cambio y crecimiento tanto en su volumen como en su complejidad.
Se ha producido el relevo en la coordinación general de la RJM LAC, el Padre Mauricio García-Durán SJ da el relevo, después de 3 años de intenso trabajo, a Javier Cortegoso Lobato.
Los días 19 y 20 de Noviembre de 2018 se realizó en la ciudad de Bogotá en Colombia, la reunión general de la Red Jesuita con Migrantes para Latinoamérica y el Caribe que convocó a las direcciones de las cuatro subregiones y representantes de las mismas. Se contó asimismo con la presencia del presidente de la Conferencia de Provinciales Jesuitas de América Latina y el Caribe (CPAL), P. Roberto Jaramillo S.J., con el delegado de las Redes Socio Pastorales, P. Rafael Moreno S.J., así como con ALBOAN y Entreculturas que son aliadas claves de la Red desde España.
Durante estas jornadas fue posible actualizar la mirada conjunta de los contextos de la migración forzada en las distintas regiones del continente, analizando las causas que obligan a las personas a migrar, los riesgos a los que se enfrenta en el recorrido y los retos de atención e integración que se presentan en los lugares a donde están llegando. “América Latina es un continente en movimiento y en huida, lo cual representa una llamada para hacer algo frente a esta realidad de migraciones masivas, migraciones colectivas, de migraciones que están también muy vinculadas a necesidades de protección internacional, también nos llama a hacer más cosas con más gente para proteger a estas personas”, recuerda Karla Rivas de Honduras quien colabora en la Subregión Centro y Norte América (RJM-CANA), en el video de presentación de la Red y la Campaña “Compartir el Viaje”.
La migración forzada en Centro América tanto hacia México, Estados Unidos o Costa Rica, el éxodo de personas de Venezuela hacia distintos lugares del continente tanto al Sur como al Norte, la continuidad del flujo de personas de Haití hacia Brasil y Chile principalmente, el desplazamiento forzado en Colombia que no se detiene, son realidades que comprometen la acción cotidiana de las distintas organizaciones, instituciones y personas que hacen parte de la Red Jesuita con Migrantes, y que nos invitan a seguir colaborando con más y más personas en todo el continente. Se hizo notar la relevancia del riesgo de invisibilización de otros flujos migratorios continentales y extra-continentales que tienen riesgo de caer en el olvido. La migración es sobre todo una historia personal, y cualquier historia personal tiene derechos que deben ser protegidos y exigidos.
La reunión también fue una oportunidad para reconocer la situación actual de la Red, valorar el aporte que está realizando en la actualidad y proyectar las acciones que la realidad de migración demanda para los años que vienen. Roberto Jaramillo S.J., presidente de la CPAL, animó a seguir enREDdándonos de tal manera que se pueda responder de manera efectiva a tan importantes retos; también contamos con la valiosa participación de Rafael Moreno, S.J. quien desde la CPAL y desde su participación activa en la Red Jesuita con Migrantes es una luz constante que nos ayuda a caminar junto a migrantes, personas desplazadas y refugiadas.
Durante este encuentro se agradeció a Mauricio García Durán, S.J. por prestar el servicio de coordinación de la RJM-LAC durante los últimos tres años y haber logrado seguir consolidando una respuesta tan diversa en esta parte del mundo. Mauricio continuará con su importante labor al frente del Servicio Jesuita a Refugiados en la Región LAC y en Colombia e igualmente coordinará la región Andina dentro de la RJM.
A partir de esta reunión, Javier Cortegoso Lobato asumirá la coordinación de la RJM-LAC hacia el futuro. Javier está vinculado al trabajo educativo y social de la Compañía de Jesús en Latinoamérica y el Caribe desde hace 17 años, y ha colaborado con la Red Jesuita con Migrantes desde diversas misiones que ha desempeñado. En base a la invitación del enREDo que propone la CPAL, el nuevo coordinador propuso un ejercicio de “Rednovación” afirmó que “EnREDarse es comprometer Identidad y Misión, y entender que la importancia no está en los nodos, ni en lo que cada uno de nosotros y nosotras pueda aportar o pueda recibir de la red, sino que la Red son las relaciones que se generan, los hilos que entretejemos de mano a mano, es la conexión misma como posibilidad y responsabilidad de mayor transformación y Justicia”.
“Encarnar en nuestra propia realidad que significa eso de Acoger, Proteger, Promover e Integrar a la población migrante, refugiada y desplazada”, es la invitación final que propuso Mauricio García Durán, S.J.