Compromiso ecológico para construir una (mejor) nueva normalidad

A la par que la red mundial jesuita trata de responder al impacto global de la COVID-19, surge también un diálogo más profundo con los equipos de Ecojesuit de las seis conferencias jesuitas. Se junta la emergencia crítica que ahora vivimos con el grito de la Tierra y de los más desfavorecidos. Es necesaria la colaboración de muchos actores para construir, urgentemente, una mejor nueva normalidad. 

Dada la situación que ahora vivimos, está claro que no nos enfrentamos solo a una cuestión de salud: la pandemia es una crisis aguda, parte de una crisis ecológica mucho más amplia y profundamente arraigada en el cambio climático, el uso de la tierra, la deforestación, la acumulación de riqueza y la injusticia ambiental. Todos estamos en riesgo pero, como en otros desastres, son los pobres y los desfavorecidos los que más sufren el abandono de la sociedad, limitando sus opciones y su voz.

Con la solidaridad como base, Ecojesuit propone un enfoque de aprendizaje en red, donde todos podemos colaborar, reconociendo humildemente que no tenemos la respuesta, pero sí el deseo de contribuir a la acción social para el cambio. La integridad de esa respuesta requiere una conversión interna y la humilde transparencia en la comunidad jesuita y la vida institucional que también buscamos compartir.

Las conferencias jesuitas han identificado seis acciones que contribuyen a la construcción de una nueva normalidad a través del compromiso y la colaboración activa. En este documento puedes consultar los compromisos para cada línea de acción.

1. Conectar la agricultura y el ejercicio empresarial

El acceso a los alimentos es una necesidad prioritaria y se refleja claramente en todas las conferencias. A ello se le suma la preocupación por generar empleo local, el desarrollo rural, los migrantes que regresan a su hogar, las desigualdades en el mercado de productores y el cambio de uso de la tierra, entre otros.

2. Abordar la integridad socioeconómica y ambiental frente a la pobreza arraigada y la degradación ambiental

3. Abogar por la acción climática, los derechos humanos y los pueblos indígenas 

Los pueblos indígenas, cuya relación con el medio ambiente es la base de su supervivencia, están entre los más amenazados. Se deben canalizar esfuerzos para proteger sus tierras, su cultura y su forma de vida.

4. Rastrear y explicar las instituciones y prácticas económicas que están surgiendo a nivel mundial

Las instituciones económicas internacionales (el FMI, el Banco Mundial, etc.) y las Naciones Unidas tienen una gran influencia en la dirección y las prioridades de las inversiones y los sistemas financieros. Tratamos de comunicar y explicar estos cambios económicos mundiales en colaboración con expertos a través de publicaciones y otros medios.

5. Reforzar la plataforma de acción de las Universidades Laudato Si’, otras Plataformas de Acción del Año Laudato Si’ y Querida Amazonia

Estas plataformas de acción son una oportunidad para destacar el papel de nuestras instituciones educativas en la acción social y ambiental, y en la investigación basada en la comunidad. 

6. Promover la espiritualidad ecológica, también en la educación básica

La conciencia y la espiritualidad ecológicas van de la mano en el desarrollo más profundo del propósito y el significado de la ecología integral entre los jóvenes. Las escuelas son un lugar clave para despertar los sentimientos de interconexión, comunidad y cuidado.

Ecojesuit busca fomentar y construir una nueva y mejor normalidad donde la justicia ecológica y social se integren en nuestros valores y estilo de vida, en línea con las Preferencias Apostólicas Universales (PAU). Buscaremos y facilitaremos el debate que incluya a las comunidades locales, los líderes empresariales, los líderes religiosos, los responsables políticos y los expertos en economía para contribuir a una perspectiva más amplia para una sociedad sostenible y justa. 

Puedes descargar el documento aquí, con todos los compromisos de cada línea de acción.